Ruta por el este de la Región Centro. Aldeias Históricas y Aldeias do Xisto en la Sierra de la Gardunha.
Castelo Novo, Janeiro de Baixo, Janeiro da Cima, Martim Branco, Monsanto, Barroca, Idanha Velha.
Ruta desde la aldea de Martim Branco por algunos preciosos pueblos de su entorno, durante unos más que asumibles 224 kilómetros que nos llevaron por aldeas y pueblos, unos incluidos en la clasificación de ALDEIAS HISTÓRICAS y los otros en las más tradicionales y rurales ALDEIAS DO XISTO. que se caracterizan e identifican por sus casas y construcciones edificadas con una roca típica de la zona llamada Esquisto o Pizarra en castellano, Xisto en Portugués.
Además un recorrido espectacular también entre poblaciones, especialmente en las proximidades de las Aldeas do Xisto donde encontraremos frondosos paisajes en la Serra de la Gardunha, carreteras sinuosas y ríos que como el Zézere de un gran atractivo paisajístico y lúdico, porque allá por donde pasa y hay una población, allí que te encuentras con playas fluviales en las que remojarse y rebajar la temperatura corporal. El día que por allí pasamos nos topamos con temperaturas no demasiado agradables para turistear de 39º, sintiéndonos obligados a disfrutar de un relajante baño en este río en su paso por la población de Janeiro da Cima.
224 km
A.- B&B Xisto Sentido. Martim Branco
B.- Idanha Velha (70 km)
C.- Monsanto (15 km)
D.- Castelo Novo (56 km)
E.- Janeiro da Cima (54 km)
F.- Janeiro da Baixo (4 km)
G.- Martim Branco (36 km)
IDANHA VELHA
79 habitantes
Histórica población con orígenes romanos en el siglo I a.c, ocupada posteriormente por los Visigodos, Musulmanes y reconquistada posteriormente para ser finalmente cedida a los Templarios que tuvieron mucha importancia en toda esta región portuguesa. Con el paso del tiempo perdió su importancia , pero ha conservado un bello patrimonio que se puede disfrutar en el recorrido por sus calles repletas de historia y muchos monumentos para ser un lugar relativamente pequeño. Destacamos varios monumentos como son varias de sus capillas,como la de San Sebastián, el puente y las murallas romanas, la Iglesia de Santa María, la Iglesia Matriz, la Picota del año 1510 o la Puerta Norte.
MONSANTO
829 habitantes
Otra histórica población esta vez con orígenes en el Paleolítico aunque del estudio de restos arqueológicos se determina que también tuvo al igual que Idanha-a-Velha asentamiento de romanos, visigodos , árabes también reconquistada posteriormente para ser también finalmente cedida a los Templarios. «Monte Sagrado» en 1938 fue considerado el Pueblo más Portugués de Portugal después de que el gobierno portugués de entonces organizarse una encuesta – concurso en el que se reconocía su patrimonio además de su cultura y tradiciones. Como premio se otorgó un Gallo de Plata que se encuentra coronando una de las torres de la población, la Torre Lucano o Torre del Reloj.
Monsanto es una bellísima población que solo se encuentra a 20 km de la frontera española, pero muy desconocido para muchos españoles. Quizás por la cercanía, desde España no hemos sabido valorar adecuadamente el más que interesante y atractivo patrimonio portugués.
Nosotros nos incluimos porque aunque conocíamos ciudades como Lisboa, Oporto, Guimaraes, Braga o Guarda, desconocíamos profundamente todas las amplias oportunidades viajeras que concede esta bella tierra lusitana. Este viaje nos cambió la visión preconcebida que teníamos del país vecino y ahora que la vida nos ha dado la oportunidad de volver a viajar hemos retomado con ilusión volver a Portugal, cosa que haremos el próximo mes de Mayo para visitar la también muy atractiva región del Alentejo en un viaje corto de 7 días.
Encaramado en una elevación montañosa de 758 metros, Monsanto es una sucesión de construcciones civiles, militares , religiosas en las que el granito es el principal elemento constructivo. Pero no solamente el granito trabajado por el hombre. Grandes rocas de granito, llamados domos que se desprendieron en épocas pretéritas de la montaña fueron aprovechadas por los pobladores para que formasen parte de sus casas y viviendas. Pasear por algunas de sus calles es casi como vivir en primera persona alguno de los capítulos de los Picapiedra, y con la sensación de encontrarse a Pedro, Pablo o Vilma al doblar una esquina.
En la zona más baja de la población se encuentran las casas más señoriales para según se va subiendo hacia las zonas más altas en las que hubo edificaciones templarias, castillo incluido, encontrar las casas más populares y auténticas que otorgan carácter a este Monsanto, con seguridad uno de los pueblos más bellos de Portugal.
Son muchos los rincones con encanto y algunas destacados monumentos como varias capillas, Iglesias como las de San Salvador y la de la Misericordia. Tiene monumentos militares como el castillo o la Torre Lucano. Al Castillo no nos decidimos no subir porque hacía demasiado calor y ya nos estaba gustando de manera suficiente lo que observamos. Acompañan algunas interesantes construcciones civiles y sobre todo las casas populares de granito a las que parece les van a caer grandes moles graníticas que forman parte de sus estructuras, tejados, etc. En definitivas cuentas Monsanto es un lugar muy, pero que muy recomendable por el que dejarse caer.
Después de caminar durante algo más de una hora decidimos tomar una cerveza con aperitivo en una bar que disponía de una terraza estupenda desde la que contemplar de unas buenas vistas de la población. Taverna Lusitana se llamaba este agradable lugar.
CASTELO NOVO
437 habitantes
Castelo Novo es otra de estas poblaciones históricas portuguesas fronterizas que cuentan con un importante pasado histórico y algunos restos patrimoniales que que vienen de aquellas épocas, con destacados monumentos provenientes de las necesidades defensivas como son los restos de murallas y castillo.
En el trayecto desde Monsanto pudimos ver algunos detalles curiosos de la adaptación de la naturaleza a las nuevas oportunidades que le ofrece en algunas ocasiones el progreso humano, así como los primeros y espectaculares ejemplares de alcornoques.
Bajo nuestro humilde punto de vista no destaca tanto como Idanha Velha o Monsanto pero tiene su pequeño aquel, que permite dar un paseo muy agradable por sus calles y rincones, casas solariegas junto con otras más populares construidas en piedra granítica. Castelo Novo está situado en las faldas de la Sierra de la Gardunha.
Son varias sus Iglesias como la Matriz de la Virgen de Gracia ,además de otras capillas menores como la del Señor de Nuestra Misericordia, la de Santa Ana o la de San Antonio. Muy bonita su plaza principal llamada Plaza de la Cámara debido a que acoge a la Casa de La Cámara del siglo XIII. En esta plaza también destaca la Picota o Pelourinho de estilo Manuelino situado en el centro de la misma. Adherida a la Casa de la Cámara hay también una de las dos Chafarizes o fuentes históricas de la Castelo Novo. En este caso es el Chafariz de Joao V , construido en el siglo XVIII. La otra fuente destacada es la de Bico también del siglo XVIII y de influencia barroca.
Por el centro del pueblo también hay huellas de su pasado romano, pasando por el medio de la población una calzada romana. Del castillo solo quedan unos mínimos restos y dos torres. Conectados por unas modernas pasarelas conviene hace el recorrido, por las buenas vistas que desde estas pasarelas se pueden tener del pueblo y su entorno paisajístico.
BARROCA
714 habitantes
Primera de las muchas Aldeias do Xisto que visitamos en este viaje. Lo cierto es que lo que pudimos ver desde el coche no nos animo a bajarnos del coche. En todo caso dejo por aquí la referencia a esta aldea porque con el paso del tiempo perdió su importancia, pero ha conservado un bello patrimonio que se puede disfrutar en el recorrido por sus calles repletas de historia y muchos monumentos para ser un lugar relativamente pequeño. Destacamos varios monumentos como son varias de sus capillas, como la de San Sebastián, el puente y las murallas romanas, la Iglesia de Santa María, la Iglesia Matriz, la Picota del año 1510 o la Puerta Norte.
JANEIRO DE CIMA
360 habitantes
Bonito el trayecto desde Castelo Novo hasta Barroca y algo más adelante Janeiro de Cima, transitando por carreteras sinuosas y evocadores paisajes.
En Janeiro da Cima, que en español viene a significar Enero de Arriba, encontramos una pequeña población en la que se disfruta de la típica arquitectura popular de la zona, en la que la pizarra o esquisto se mezcla con piedras blancas, cantos rodados extraídos del ribereño río Zezere. Las casas y enrevesadas calles crecieron alrededor de su Iglesia central, que destaca encalada en blanco con algunos toques de pizarra. La mezcla de estas construcciones de piedra y esquisto conjuntamente con otras encaladas en blanco impoluto, forman un conjunto arquitectónico bastante atractivo para dar un breve paseo por el mismo.
Una vez terminamos el pequeño recorrido por los rincones del pueblo, y con una temperatura de 44ª ( la que marcaba el coche, que no se si sería la real, pero calor hacía un bastante) decidimos acercarnos hasta la playa fluvial de Janeiro y allí que nos pegamos un más que merecido y refrescante baño.
JANERIO DE BAIXO
Poco interés tuvo para nosotros esta pequeña población, también incluida en la clasificación como Aldeia do Xisto.
Quizás llegamos cansados pero salvo 4 casas de pizarra y su blanquísima Iglesia no encontramos gran cosa en Enero de Abajo. El tema es que se encuentra en el camino de vuelta hasta nuestro alojamiento en Martin Branco que se hace por buenas carreteras y paisajes agradables. El día comenzó muy intenso con Idanha, Monsanto y Castelo. Bajó de intensidad emocional en Barroca y los Janeiros pero al menos el recorrido de vuelta por la Serra de la Gardunha y las riberas del río Zézere compensan esta falta de atractivos de algunos de estos último pueblos del día.
Antes de ir a Martin Branco compramos algo de agua y viandas en pueblo llamado Almaceda en el que en el centro del pueblo hay unas piscinas naturales sobre el río bastante interesantes en las que pegarse un baño. Todos los pueblos de la zona cuentan con «praias fluviales» muy bien adaptadas y preparadas para el disfrute veraniego.
Culminamos el día, un día también largo e intenso, en el que gozamos de pueblos maravillosos como Monsanto y disfrutamos de un bonito recorrido en coche por la Sierra de la Gardunha.
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