Visitar en un día Cinque Terre, en tren y barco.
Llegamos a Liguria procedentes de Toscana, con la ilusión de conocer esta para nosotros menos conocida región , pero de la que teníamos información previa de sus enormes atractivos.

Puedo decir , no que cumplió, sino que sobrepasó ampliamente las expectativas. Muy recomendable pasar unos días por esta montañosa y marítima región.
Después de dejar atrás nuestra peripecia por la Toscana vía Alpes Apuanos llegamos a Liguria encontrándonos con un paisaje plenamente Mediterráneo al llegar a la provincia de La Spezia y su capital.


No paramos en esta ciudad y nos fuimos directos al alojamiento que reservamos en , en la población de Volastra, pleno Parque Nacional de Cinque Terre y Portovenere, declarado por la UNESCO Patrimonio de la Humanidad.
Las Cinco Terre, Porto Venere y las tres islas de Palmaria, Tino y Tinetto han sido incluidas en la World Heritage List por ser un significativo ejemplo del modo en que los hombres pueden transformar y modelar el ambiente, sin alterar la belleza del paisaje
Volastra no es una de las poblaciones destacadas del parque pero se encuentra muy cerca y perfectamente comunicada por medio de un servicio de minibuses con una de las poblaciones estrella de este Parque , Manarola.
Son dos poblaciones diferentes , pero para entendernos es como si Manarola fuera la parte de la ciudad en línea de mar y Volastra la zona alta de la misma, a diez minutos de la primera y separadas por una empinada carretera rodeada de olivos, viñas y terrazas cultivadas y trabajadas de manera espectacular por la mano del hombre.
La orografía y afluencia de turistas a las poblaciones del parque hace necesaria y más práctica la utilización de transporte público para recorrer el territorio
Bus, tren y barco
El bus para bajar desde Volastra a Manarola. Allí y si vas en coche los aparcamientos se encuentran muy alejados por empinadas cuestas hasta llegar al casco urbano. Y organizándose un poco es muy fácil y mucho más cómodo hacer uso de estos servicios de transporte público que permiten ver todas las poblaciones del parque en un solo día.
Después de dar una vuelta a los horarios de trenes y barcos, decidimos hacer una parte del recorrido en tren desde Manarola a Monterosso, parando en Corniglia, Vernazza y el propio Monterosso pudiendo disfrutar de un paseo por la estructura urbana de todos estos pueblos.
Con tiempo suficiente de comer llegamos a Monteroso y después de yantar tomamos un barco que nos permitió disfrutar del soberbio paisaje que nos ofrece el parque de Las Cinque Terre tanto por la naturaleza , como por lo colorido de sus poblaciones prácticamente colgadas en acantilados sobre el mar.
En este recorrido el barco para de nuevo en Vernazza y Manarola, pudiendo distinguirse sobre una cornisa el pueblo de Corniglia. Por supuesto no volvimos a bajar, pero la visión desde el barco de estos pueblos también nos encantó.
Después de Manarola , el barco pone rumbo a Riomaggiore . Decidimos no bajarnos en esta parada y si llegar hasta la ciudad de Portovenere, más grande que estos pequeños pueblos pesqueros y agrícolas.
Los diferentes horarios de ruta marítima permiten volver a Riomaggiore, después de visitar Portovenere, para en ese momento si ,descender y visitar caminando la bella Riomaggiore.
Y de vuelta a Manarola utilizamos el tren, para terminar tomando el minibus que nos llevó hasta Volastra.
De esta manera y con punto de de partida en Volastra es posible visitar y apreciar las maravillas que nos ofrecen las Cinque Terre, en u solo día
Sobra decir que nosotros no contábamos con mucho más tiempo del que estuvimos para permanecer allí, cuestión que merece sobradamente la pena.
Organizándose es más que posible recorrer el parque en un solo día. Hay rutas para hacer estos recorridos caminando , pero para ello evidentemente hay que ir con más días de los que nosotros disponíamos.
Ruta por las Cinque Terre.
Mix Tren y Barco.
Recorrido en Tren (4 euros)
Manarola- Corniglia- Vernazza- Monteroso
Recorrido En Barco (17 euros- Una hora aprox)
Vernazza- Manarola- Riomaggiore- Porto Venere- Riomaggiore
En tren:
Manarola


MANAROLA
Una vez dejamos los equipajes nos bajamos a ver Manarola en la tarde. Y este aperitivo, de lo que al día siguiente íbamos a encontrarnos nos abrió el apetito para pegarnos un atracón de Cinque Terre.
Manarola es un tesoro urbanístico, llena de las típicas casas-torres, de estilo genovés. Fundada en el S. XII.



Se comunica con Riomaggiore por la Vía dell Amore, ruta turística y de senderismo . Excavada en la roca dicen que ofrece unas vistas impresionantes entre el Mediterráneo y las rocas escarpadas que lo dividen del mar.
En nuestro recorrido del después de hacer el trayecto en tren, y utilizando el barco pudimos disfrutar de algunas, también maravillosas vistas de Manarola, en esta ocasión desde el mar.


CORNIGLIA
La principal diferencia con los otros pueblos del parque es que Corniglia no tiene acceso directo al mar, sino que se encuentra en la cima de un promontorio , circundado en todos sus lados por viñedos y olivares.
Las vistas que obtuvimos desde el tren fueron, como casi todas las realizadas en el Parque ,muy especiales.



No quedándose atrás, ni muchísimo menos las que se pueden disfrutar desde el barco.



Su estación de trenes se encuentra distante del pueblo (casi al nivel del mar) y se hace una buena caminata a través de la “Lardarina”, una larga escalinata compuesta de 33 rampas y 377 escalones.





Corniglia es el más pequeño de los 5 pueblos, por lo que es fácil de recorrer .Entre las principales atracciones de este lugar, se encuentra la plaza de Largo Taragio, donde se asoma la iglesia de Santa Caterina y la parroquia de San Pedro.
VERNAZZA
De los 5 pueblos que conforman este parque, Vernazza es la que ha conservado mayormente el aspecto de ciudadela marinera y posiblemente a nivel urbanístico sea la población más hermosa de las cinco que conforman el parque.
Entre los atractivos locales que se deben visitar se encuentran el Castillo Doria que está en la parte más alta de la ciudad y desde el que se tiene unas vistas inolvidables de toda la región de Cinque Terre; así como la Piazza Marconi que tiene vistas sobre el puerto local en donde cafés y restaurantes asientan sus terrazas, y la Iglesia local que data del siglo decimocuarto.







La aproximación en barco a Vernazza es menos espectacular en mi opinión que por ejemplo Corniglia, Manarola o Riomaggiore, aunque no por este motivo está exenta de belleza.

MONTEROSSO
Monterosso se encuentra en el extremo más occidental de las Cinque Terre y además desde allí tomamos el Botello (Barco) que nos llevaría hasta la población de Porto Venere, previa parada y aproximación marítima hasta todas y cada una de las Cinque Terre (con la excepción ya comentada de Corniglia).
Portovenere fuera de las consideradas poblaciones específicas que dan nombre al parque , aunque también incluida en el mismo, cuenta con una singular belleza pincelada por su estructura urbana y emplazamiento geográfico.
La parada del tren en Monterosso lo hace en la parte más moderna de la población que además cuenta con zonas de playa y paseo marítimo. Tras un pequeño paseo se llega hasta la zona antigua cuyos orígenes dicen se remontan al medievo.






Monterosso es el más grande de los cinco pueblos de Cinque Terre y cuenta con un buen número de atracciones turísticas, incluyendo un castillo , una catedral, varias iglesias y una preciosa playa de arena con su correspondiente paseo marítimo y como no, unas callejuelas por las que merece muy mucho la pena deambular sin rumbo fijo , disfrutando como lo hicimos nosotros de los encantadores rincones que nos ofrece.






Decidimos comer en Monterosso , bruschettas con ensalada en uno de los muchos restaurantes que ofrece el pueblo. Y después de reponer fuerzas tomamos el Botello que nos llevaría hasta el extremo oriental del Parque, Portovenere.
El viaje dura una hora aproximadamente, considerando que hace una corta parada en cada una de las poblaciones que nosotros ya habíamos visitado. Por supuesto no bajamos de nuevo, pero si que pudimos disfrutar de la visión desde el mar de estos pueblos , así como de la naturaleza que les rodea, naturaleza modelada por el hombre con esos cultivos sobre terrazas imposibles.
PORTOVENERE
Portovenere representa la perfecta conjunción de naturaleza y arquitectura que, como los demás pueblos de la costa ligur, presenta un delicioso pequeño puerto, envuelto en una infinita gama de colores de las casas , empinadas escalinatas y callejones estrechos.
La llegada marítima al pueblo es ciertamente impactante recibiéndonos vigilante la fortaleza del Castillo Doria y en un promontorio la Iglesia de San Pedro.





Es espléndida la iglesia de San Pedro, que surge sobre el promontorio delle Bocche. Construida en época paleocristiana y remodelada en estilo gótico, desde la iglesia se puede disfrutar de una vista impresionante.






Son también característicos el santuario de la Madonna Bianca, anteriormente conocida como iglesia parroquial de San Lorenzo, erigida en el siglo XII en estilo románico ,posteriormente restaurada y ampliada, y el Castillo de Doria.




Los coloridos y esbeltos edificios nos dan la bienvenida invitándonos a pasear por sus callejuelas y rincones que ya desde el barco se adivinan muy atractivos….




RIOMAGGIORE
Volvimos a tomar el barco para desplazarnos por vía marítima hasta Riomaggiore. Por lo tanto con este nuestro recorrido arribamos en dos ocasiones ,más bien gozamos ,hasta esta bella población de las Cinque Terre. Aunque solo en la segunda nos bajamos para recorrer sus calles y una vez cumplida esta misión, tomar el último medio de transporte del día, el tren hasta Manarola y minibus hasta nuestro alojamiento en Volastra.
Riomaggiore es el pueblo más oriental de las Cinque Terre, pueblo de pescadores. Siguiendo la tónica del resto de pueblos tiene casas muy coloridas asentadas sobre empinadas y estrechas calles . En esta ocasión las casas parecen caer y desprenderse de la montaña en cascada, para desembocar sobre el mar mediterráneo y permitiendo, a nosotros los visitantes y turistas lograr fotos que se convierten en auténticas postales.




Por supuesto que es imprescindible pasear por sus calles desde el pequeño malecón , disfrutando de la vida y colorido de Riomaggiore.



Desde Riomaggiore volvimos a utilizar el tren para llegar hasta Manarola. Cansados después de tan intenso día ,compramos unas viandas en un lugar de comida preparada, pero Italiana y casera. Como comprenderéis no es lo mismo que comprar comida rápida en un burguer….. y mucho menos degustarlo en la terraza del Affittacamere Niria con vistas al Mediterráneo.
En el túnel del acceso al tren que había de llevarnos, había una exposición de fotografías sobre el parque…… incorporo algunas porque realzan la evidencia de la perfecta conjunción entre una naturaleza abrupta , y la explotación racional y adecuada de la misma por parte del ser humano.



Y de esta manera culminamos nuestra visita al Parque Nacional de las Cinque Terre, sin lugar a dudas uno de los lugares más hermosos que haya visitado.
Como ocurre en otras muchas ocasiones, regiones y lugares inesperados y menos nombrados consiguen sorprendernos. Esta es la realidad que nos ofreció Liguria en general y el Parque Nacional de las Cinque Terre en particular